Jimval Estudios: El arte familiar que da vida a las piñatas

SALTILLO, Coahuila.- Localizada sobre la la calle de Mariano Matamoros, en el centro de Saltillo Jimval Estudios es una empresa familiar con raíces profundas en el arte y la creatividad. Nacida en Minatitlán, Veracruz, este negocio se dedica a la creación de piñatas artísticas, utilería y réplicas de personajes, destacándose por la originalidad y el detalle de sus figuras. Hace cinco años, la familia Jiménez llevó su talento y pasión a la capital del sarape, donde han encontrado un espacio para seguir desarrollando su arte y dejando su huella en cada pieza que producen.

Adrián Jiménez, el patriarca de la familia y líder de Jimval Estudios, ha dedicado más de dos décadas de su vida al trabajo artesanal. Su experiencia en pintura, carpintería, herrería y mantenimiento lo ha convertido en un maestro de las manualidades, algo que heredó de su propio padre, quien también era artesano. Desde su niñez, Adrián estuvo inmerso en el mundo de la creación artística, y con el tiempo, esto evolucionó hacia la creación de piñatas y figuras más complejas.

Desde hace 23 o 24 años, siempre he trabajado en el área de mantenimiento, pintura, carpintería y herrería. Desde muy niño, mi papá también era artesano, y eso me llevó a dedicarme a la pintura, haciendo murales y rótulos para escuelas, áreas de publicidad, y más. Poco a poco, empezamos a desarrollar las piñatas y otros trabajos en fibra, PVC y piezas de mayor tamaño”

En la capital jarocha, Adrián y su familia colaboraron en la elaboración de carros alegóricos, lo que les brindó la oportunidad de perfeccionar sus habilidades en la creación de grandes estructuras y decoraciones artísticas. Este trabajo en los carros alegóricos, que realizaban varias veces al año, ayudó a Jimval Estudios a consolidar su identidad como un negocio artesanal y artístico.

Un negocio familiar

 Uno de los pilares más importantes de Jimval Estudios es el trabajo en equipo. Adrián no está solo en esta aventura; su esposa y sus hijos Kevin, Caleb, Obed e Isaac son piezas clave en el funcionamiento de la empresa.

“Gracias al apoyo de mis hijos y mi esposa, todos somos un equipo. Cada uno tiene una función importante”, explica Adrián con orgullo. Obed, el menor, tiene habilidades para cortar y dibujar, mientras que Kevin se encarga de las ventas y es quien impulsa el negocio. Caleb, por su parte, es el encargado de los detalles finos como la pintura rápida de ojos y bocas, mientras que Isaac se ocupa de los materiales de cartón y papel, esenciales para la creación de las piñatas.

Además, la esposa de Adrián tiene un papel vital: es la experta en la preparación del engrudo, un componente esencial en la elaboración de las piñatas. “Si yo lo hago, me queda muy aguado o muy espeso, pero ella siempre lo hace perfecto”, reconoce Adrián.

El secreto: trabajo en equipo

 El éxito de Jimval Estudios se debe en gran parte al esfuerzo conjunto de la familia. “Ese es nuestro secreto: el trabajo en equipo. Yo solo no podría hacer todo. Cada pieza lleva la intervención de cada uno de ellos”, afirma Adrián.

Cada miembro de la familia aporta su talento y dedicación para asegurar que cada creación de Jimval Estudios sea única y especial. Desde el diseño y la pintura hasta la venta y la logística, la familia Jiménez ha sabido combinar sus habilidades para llevar adelante un negocio que refleja no solo su creatividad, sino también su unión.