Fumigados
Nada se ha hecho para resolver la crisis ambiental en la zona metropolitana de Monterrey. La refinería arrojó fuertes cantidades de dióxido de azufre.
SAN PEDRO GARZA GARCÍA, Nuevo León.- Nada se ha hecho para resolver la crisis ambiental en la zona metropolitana de Monterrey.
Seguimos padeciendo las emisiones tóxicas por parte de las grandes empresas, comenzando por la Refinería de Pemex, en Cadereyta.
Para muestra, la fumigada que nos recetó la tarde y noche del lunes 20 de enero.
La refinería arrojó fuertes cantidades de dióxido de azufre.
Estas emisiones fueron percibidas por habitantes de 79 colonias en los municipios de Cadereyta, Juárez, Guadalupe, Monterrey, San Pedro Garza García y Santa Catarina, Nuevo León.
El reporte de los vecinos de estos sectores indicaba que los olores eran parecidos al gas o a combustible.
Y claro… Las autoridades culparon en primera instancia a las condiciones climatológicas.
Dijeron que la inversión térmica, por el brusco descenso de la temperatura, ocasionó que los gases quedaran atrapados cerca de la superficie en una capa de aire frío… y que “la pluma de contaminantes viajara a muy baja altura”. Así lo decía el comunicado que envió la Secretaría de Medio Ambiente en el estado.
Días después, en la zona citrícola, ocurrió algo similar… y esto fue atribuido “a un cambio en la dirección del viento”.
O sea que todo se debe al clima y no a las fuentes de contaminación, fijas y móviles.
Sabemos de antemano que uno de los principales causantes de la crisis ambiental es la Refinería de Pemex, en Cadereyta, hasta ahora intocable, en donde las promesas que se hicieron en tiempos de campaña, han quedado huecas.
Y ante ese constante señalamiento contra la refinería, otros grandes contaminadores, llámese industria pesada, siguen haciendo de las suyas.
Muy ocasionalmente vemos que se tomen cartas en el asunto, tal como ocurrió recientemente con la empresa Zinc Nacional.
Pero antes fueron ventilados en un medio de comunicación internacional los añejos problemas que enfrentan los vecinos de San Nicolás de los Garza que viven en los alrededores de esa empresa.
Según la investigación, del periódico The Guardian y Quinto Elemento Lab, se encontraron altas concentraciones de plomo, cadmio y arsénico en muestras de polvo recolectadas en las casas de los vecinos y analizadas por un experto en toxicología de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Fue entonces cuando la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente impuso la clausura total temporal de equipos que no se encuentran en su Licencia Ambiental Única.
La empresa se posicionó al respecto… dice que todo está en regla… y que operan de acuerdo a estándares internacionales… y que “en caso de que se encuentren áreas de mejora en su operación, harán los ajustes necesarios para fortalecer la seguridad de las condiciones de trabajo para colaboradores y comunidades vecinas”.
Pues ojalá, porque las quejas llevan décadas…y que le sigan con los demás.
Por un lado, qué bueno que hubo reacción por parte de las autoridades.
Y por otra parte, qué mal que no a todos se les mida con la misma vara.
Como si el aire que ellos respiran fuera distinto.
A todos nos fumigan por igual.
Soy Gregorio Martínez…Más Allá de la Noticia.
Nos vemos y nos escuchamos
Aquí en POSTA.